
San Jacinto, uno de los lugares turísticos más visitados de Tarija, se ha convertido en motivo de quejas por la mala atención, engaños y falta de control en los restaurantes locales. La ciudadana Miriam Mamani expresó su molestia tras visitar uno de estos establecimientos, donde le sirvieron pacu en lugar de carpa sin previo aviso, y al reclamar, recibió una actitud agresiva por parte del personal del restaurante.
“Prefieren engañar a la gente en vez de decir que ya no tienen todo su menú”, manifestó, solicitando a las autoridades correspondientes, como la Intendencia y la Dirección de Turismo, que realicen inspecciones para evitar que se siga perjudicando a los visitantes.
Otros ciudadanos respaldaron la denuncia. Javier Giménez criticó la falta de organización en el estacionamiento y calificó la atención de las cabañas como pésima, señalando que la comida es de mala calidad. “El tráfico es un caos, no hay espacio para maniobrar”, aseguró, recomendando visitar restaurantes ubicados más allá de las cabañas.
Elizabeth Quiroga coincidió en la deficiente calidad de los alimentos y Andrea Rengifo agregó que incluso llegó a salir con síntomas de salmonella después de comer en el lugar. “San Jacinto tiene un gran potencial, pero se necesita mejor gastronomía y atención al cliente”, sugirió.
Yapce Os opinó que San Jacinto solo sirve para pasear, no para comer, debido a los altos precios y la baja calidad de la comida. “Te quieren vender cualquier cosa y no es barato”, lamentó.
La ciudadanía exige que la Alcaldía de Tarija y Defensa del Consumidor tomen cartas en el asunto para garantizar que los turistas puedan disfrutar de una experiencia agradable y segura en San Jacinto, un lugar que, pese a su belleza natural, está siendo opacado por la mala administración de sus servicios gastronómicos.
Fuente: La Voz de Tarija