
El Gobierno dice que los logros se deben al proceso de industrialización que encara el presidente Luis Arce
El viceministro de Comercio Exterior e Integración, Benjamín Blanco, informó que Bolivia redujo importaciones en más de 658.000 toneladas sobre una base de 200 productos de rubros como alimentos y bebidas. Justifica este descenso como resultado de la política de industrialización con sustitución de importaciones y el fortalecimiento de la producción, que lleva adelante el Presidente del Estado, Luis Arce.
Según la autoridad, se redujo importaciones en productos como el trigo (en harina y en grano), arroz, jugo de frutas, lácteos, productos a base de cereales, pescado y derivados, sorgo en grano, papa, peras, manzana y uvas frescas.
“Bolivia ha reducido sus importaciones en más de 200 productos (…), vemos una disminución bastante grande de importación, lo que quiere decir que ese producto en vez de importarse se está produciendo en nuestro país y es un resultado concreto de la política de sustitución de importaciones”, explicó en una entrevista con la ABI.
Los datos revelan que en 2022 disminuyó las importaciones de harina de trigo en más de 300.000 toneladas (t); de grano de trigo en casi 100.000 toneladas; de papa en 16.000 toneladas; de arroz en 15.000 toneladas; de jugos de frutas en 12.000 toneladas; y de productos a base de cereales en 5.000 toneladas.
“Hemos dejado de importar 10.000 toneladas de productos lácteos”, resaltó. Respecto al grano de trigo, si bien el país sigue importándolo, lo que disminuyó es el volumen, “es decir, explicó, cada vez vamos a ir necesitando comprar menos y vamos a lograr nuestra soberanía y seguridad alimentaria”.
“Se tiene producción de trigo en nuestro país, esta producción de trigo se ha incrementado y seguimos siendo importadores de trigo, pero el volumen de importación ha disminuido”, insistió.
Contrabando
A fines de septiembre, la Cámara Nacional de Industrias (CNI) emitió un estudio sobre las cifras que deja el contrabando en el país. En el informe se desglosa que el Estado pierde más de $us 900 millones por este delito, que mueve $us 3.331 millones al año. Además, el contrabando crece más que el Producto Interno Bruto (PIB), entre 7% a 8% anual, mientras que el crecimiento de la economía está en promedio de 4%.
Los rubros que más se ven afectados por el contrabando son los de las bebidas alcohólicas, bebidas analcohólicas, alimentos, la industria farmacéutica, textil y muebles, según la CNI.
Este estudio se realizó con la base de informes de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB). En estos datos se muestra que en 2022 el contrabando de mercancías llegó a $us 3.331 millones cuando en 1999 se cifraba en $us 1.000 millones.
Los resultados también develan que los comisos de contrabando ejecutados por la Aduna Nacional de Bolivia representan el 3,18% del valor del valor total del negocio ilícito en 2022. La CNI calcula que la evasión tributaria entre 1999 y 2022 se cifra en $us 930 millones por Gravamen Arancelario (GA) e Impuesto al Valor Agregado (IVA).
EL DEBER